Lorenzo, nuestro pequeño Principito, ya forma parte de nuestras vidas.
Nos enamoró durante la primera sesión que le hicimos un año atrás. Su sonrisa, alegría sinfín y su carácter cariñoso hace que sea un niño absolutamente mágico.
Si la anterior sesión fue en la costa de nuestra isla, en esta ocasión optamos por irnos al bosque. Y además de Lorenzo y sus padres, se sumaron sus abuelos. Juntos forman un preciosa familia, de ésas que sin duda dejan huella.
Amigos, ¿para cuándo la tercera?:-)